domingo, 18 de noviembre de 2012

Donde hay unos hay otros

A veces la vida nos bendice con muchos dones y podemos llegar a creer que somos insustituibles pero es cuando debemos recordar ser humildes y sencillos.

Seguramente todos conocemos a personas que poco a poco se fueron superando en la vida; pero unas se volvieron orgullosas y parece que sus triunfos les han hecho olvidar que antes vivían de otra manera; sin embargo, hay otras que aunque son igualmente triunfadoras siguen viviendo como antes, con sencillez, con la misma amistad y humildad; parece que sus triunfos no les importan tanto sino su familia, sus amigos y su forma de ser.
Felizmente, la mayoría de mis amigos no son vanidosos, engreídos ni orgullosos.
Cuando alguien juega mejor que los demás, cuando aprende más fácil que los demás, cuando canta o declama mejor que los demás, o cuando tiene alguna habilidad especial, debe sentirse bendecido y no superior a los otros.
En un equipo de fútbol de mi ciudad hubo jugadores que poco a poco se fueron haciendo famosos, y cuando otros equipos se los quisieron llevar, todos los aficionados, mediante las radios y la televisión solíamos pedirles que no se vayan. Unos se quedaron pero otros, por ganar más dinero, se fueron igual.
Sin embargo, a algunos no les fue tan bien, y poco a poco quedaron en el olvido.
Uno de ellos, cuyo nombre no voy a decir, quiso volver. Pero, como el equipo tuvo que aprender a vivir sin él, hizo que su suplente mejorara y finalmente se ganara el puesto, llegando a ser un buen goleador.
Supe después que el jugador que quiso volver quedó sin trabajo y ya no se supo mucho más de él. Parece que finalmente aceptó jugar en otro equipo casi desconocido.
Esto nos enseña una cosa: ni los buenos ni los malos tiempos son eternos, y además, la vida nos da oportunidades que casi nunca se repiten; así que cuando tenemos alguna es mejor aprovecharla y no ir dando saltos por aquí y por allá, como si nuestra buena suerte fuera eterna.
Y lo más importante. No debemos creernos únicos. Y cuanto mejor nos vaya debemos ser más sencillos y más humildes. Puede que nos dure mucho tiempo, o puede acabarse mañana mismo.
Si los demás nos valoran, debemos ser agradecidos, porque si nos volvemos orgullosos, y despreciamos lo que tenemos, puede que lo perdamos sin vuelta.
Todos somos valiosos; pero hay que recordar que donde hay unos también hay otros…
Verdad?

Otros artículos:






(Si este contenido te parece interesante, compártelo con tus amistades mediante la ficha “Me gusta” o los botones de redes sociales que hay debajo de estas líneas. Es fácil y sólo toma unos segundos. Gracias por tan amable detalle)

No hay comentarios:

Publicar un comentario