Cuando entramos a Internet es como entrar a un mundo en que hay cosas lindas pero también desagradables y peligrosas.
A todos nos gusta entrar en Internet porque podemos encontrar de todo: para las tareas, para la universidad, para divertirse y también para hacer amistades.
Otros como yo, tienen sus blogs donde cuentan a sus amigos las cosas que hacen, sus pensamientos y algunas fotos. Pueden ser profesores, artistas o sólo gente que le gusta publicar.
He sabido que hace mucho tiempo no había Internet y la gente usaba el correo y las cartas en papel para comunicarse con su familia en otras partes. También sólo había libros y no como ahora en que todo está en discos o flash memory.
Mi profe en la escuela me dijo que antes las tareas eran más difíciles porque había que ir a las bibliotecas, pero ahora se va a los sitios de Internet público, y luego de investigar puedes jugar un poco.
Entonces, es una gran ayuda.
Pero también es algo peligroso.
Porque hay muchos virus de computadora que en un momento pueden borrar toda la información y las tareas.
También hay desconocidos que usan con maldad lo que ponemos en el Internet para que lo sepan nuestros amigos. Lo que publicamos lo leen por igual los buenos y los malvados. Incluso me dijeron que hay muchos malvados que hacen daño a los niños y los jóvenes porque pueden saber dónde viven, quiénes son sus padres y cuándo están solos.
Por eso nunca debemos publicar en qué calles vivimos, cómo es nuestra casa, a qué hora salen nuestros padres, el número de nuestro teléfono, y cosas así, porque los malvados se pueden enterar.
Además, los niños no debemos conversar o chatear por Internet. Hay personas que se hacen pasar como si fueran nuestros amigos, disimulando que son niños cuando en verdad son malvados grandotes.
Por eso es mejor entrar a Internet acompañados de nuestros padres o hermanos mayores, para que nos ayuden a cuidarnos de esas cosas malas que puede haber.
El Internet es muy interesante, sólo hay que tener mucho cuidado. Se parece a los parques: hay cosas lindas pero también puede haber gente mala, verdad?
Es un consejo que les doy…
Chau.
A todos nos gusta entrar en Internet porque podemos encontrar de todo: para las tareas, para la universidad, para divertirse y también para hacer amistades.
Otros como yo, tienen sus blogs donde cuentan a sus amigos las cosas que hacen, sus pensamientos y algunas fotos. Pueden ser profesores, artistas o sólo gente que le gusta publicar.
He sabido que hace mucho tiempo no había Internet y la gente usaba el correo y las cartas en papel para comunicarse con su familia en otras partes. También sólo había libros y no como ahora en que todo está en discos o flash memory.
Mi profe en la escuela me dijo que antes las tareas eran más difíciles porque había que ir a las bibliotecas, pero ahora se va a los sitios de Internet público, y luego de investigar puedes jugar un poco.
Entonces, es una gran ayuda.
Pero también es algo peligroso.
Porque hay muchos virus de computadora que en un momento pueden borrar toda la información y las tareas.
También hay desconocidos que usan con maldad lo que ponemos en el Internet para que lo sepan nuestros amigos. Lo que publicamos lo leen por igual los buenos y los malvados. Incluso me dijeron que hay muchos malvados que hacen daño a los niños y los jóvenes porque pueden saber dónde viven, quiénes son sus padres y cuándo están solos.
Por eso nunca debemos publicar en qué calles vivimos, cómo es nuestra casa, a qué hora salen nuestros padres, el número de nuestro teléfono, y cosas así, porque los malvados se pueden enterar.
Además, los niños no debemos conversar o chatear por Internet. Hay personas que se hacen pasar como si fueran nuestros amigos, disimulando que son niños cuando en verdad son malvados grandotes.
Por eso es mejor entrar a Internet acompañados de nuestros padres o hermanos mayores, para que nos ayuden a cuidarnos de esas cosas malas que puede haber.
El Internet es muy interesante, sólo hay que tener mucho cuidado. Se parece a los parques: hay cosas lindas pero también puede haber gente mala, verdad?
Es un consejo que les doy…
Chau.
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